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Marne Osorio Lima, al otro día de recibirse como Intendente de Rivera

HECHALARIVERA. Desde Rivera /Entrevista Eduardo Mérica para Diario Uruguay.

 

Cuando el sol disimulaba la tristeza de la tarde castigando el primer frío de invierno que se aproxima, y cuando decidimos subir el repecho de la cuadra de la calle Joaquín Suárez para llegar al 733, donde se ubica la casa del electo Intendente Municipal de Rivera, Dr. Marne Osorio Lima, al pie de la entrada escuchamos resonar en nuestros oídos la melodiosa canción de campaña: “Vamos con Marne, pasá la posta”, donde por un instante creímos que brotaba sin disimulo en los labios de todos los riverenses, suavemente, como queriendo esconder el temor por los números y este emocional momento de la historia política de Rivera. Entendiendo fielmente que el pasado inmediato no había sido el de un año cualquiera, porque para este hombre ya tiene el clima especial de un nuevo emprendimiento, de una nueva aventura. De esas que se disfrutan por lo inesperado… El de comprobar que Rivera tiene un Intendente como la gente.

 

“Nosotros lo que sentíamos era lo que reflejaba la encuesta que presentaron ustedes”

– No queremos todavía que usted asuma ya mismo la Intendencia Departamental de Rivera, porque la propuesta de Diario Uruguay es conocerlo bien a fondo, desde el momento que vino a este mundo, y así recorrer toda su vida al día de hoy. Creemos que es necesario que lo conozcan y saber como nunca quién es Marne Osorio. Entonces, empecemos de una buena vez…
-Sencillamente: ¿Quién es Marne?, para los riverenses y para el Uruguay.
– Bueno… Yo nací el 4 de febrero de 1966, tengo 44 años. Nací en el barrio Rivera Chico, en una “casita” muy humilde, mi papá en ese momento era albañil, mi mamá atendía una peluquería, soy el tercero de cuatro hermanos, después vino una cuarta hermana… y fue la familia en la cual yo me crié… Tuve una niñez muy feliz, con muchas limitaciones de índole financiero porque fue una familia que pasó mucho trabajo, con algunos períodos de falta de trabajo o de trabajo insuficiente…

-¿Cuando dice “pasamos mucho trabajo en casa” qué quiere decir…?
– Mi padre después siguió trabajando como albañil, y al cabo de algunos años pudo montar una pequeña “empresita” constructora y así siguió desempeñándose como constructor… Mamá, al cabo de algunos años tuvo que cerrar la peluquería porque no dio “cierto”… Y tuvo que conseguir trabajo como vendedora de tienda, donde trabajó muchísimos años… en tiendas como Siñeriz, El Siglo y en aquella de Los – viejos – Muchachos… y se jubiló en ese ramo. Pero mi niñez, que por un lado pude haber tenido algunos momentos de dificultad, tengo recuerdos realmente muy lindos porque pertenezco a la generación donde nos criábamos en los barrios jugando a la pelota en la calle, andando en bicicleta, con el aro y el arco, bañándonos en las lagunitas de la vuelta, yo me bañaba en la piedra furada…

– Está contando cosas que ya no se realizan entre nosotros…
– Que no se hacen. Donde teníamos una relación de vecindad, y donde si había alguna dificultad o se necesitaba algún elemento se lo prestaban entre vecinos, entonces, una niñez muy cargada de afectos. Estoy recordando las primeras televisiones en el barrio, yo tenía dos años cuando abrió Canal 10, entonces, al cabo de algunos años alguna televisión en la cuadra había, y nos juntábamos para ver a Tarzán o alguna otra película vieja que pasaban y allí nos juntábamos toda la gurisada del barrio. Y luego la situación en general de la familia fue mejorando, mi padre tuvo algunos buenos trabajos, se consolidó bastante su empresa constructora, y nos permitió mejorar un poquito en cuanto a la calidad de vida en lo económico, digamos, en lo doméstico.

– ¿Y en sus estudios cómo se desempeñó desde un principio?
– Fui a la Escuela pública número 2, luego pasé y entré al Colegio Teresiano donde estuve tres años, en un momento donde había becas. Más tarde tuve un breve pasaje por el Liceo Militar de cuatro meses y… no era lo mío y me vine. Luego me metí en el Liceo Pomoli, y por allí terminé el secundario e hice el bachillerato en medicina. Porque pensaba seguir medicina pero… inventé en casarme cuando terminé el bachillerato, con mi actual esposa (Sandra) con la cual éramos novios desde los 15 años. Yo tenía 19 años, nos fuimos a Montevideo y decidimos casarnos.

“CREO QUE LA GENTE VOTÓ UNA GESTIÓN, QUE TUVO UNA IMPRONTA. VOTÓ UN ESTILO, DE ENCARAR UN GOBIERNO DEPARTAMENTAL. VOTÓ UN EQUIPO, QUE TRATAMOS DE MOSTRARLO SIEMPRE. Y NO UNA PROPUESTA PERSONALIZADA EN ALGUIEN. VOTÓ UN CANDIDATO. QUE YO TRATÉ Y ME ESFORCÉ MUCHÍSIMO POR TRATAR DE HACERME CONOCER”

– De su ida a la Capital… ¿es donde usted se enamora de su profesión o de la política?
– Después que me casé cuando estaba en Montevideo, tuve dificultad para poder empezar la Facultad porque tenía que trabajar muchas horas al día, y recién con 21 años – dos años después de estar allá – pude empezar la Facultad. Porque conseguí un empleo que me permitió trabajar siete horas y quince… y el resto de las horas dedicárselas a la Facultad. Cuando fui a inscribirme a la Facultad, me dije: “pucha, ¿inscribirme en Medicina, que es tan largo? Capaz que me inscribo en algo más corto,” En aquel momento Veterinaria era seis años, y me inscribí en Veterinaria, medio como descarte… Y fue una de las grandes elecciones que hice en mi vida.

– ¿Por qué?
– Porque me di cuenta cual acertada fue esa elección. Porque realmente me siento vocacionalmente muy vinculado a la profesión de Veterinario. En cuanto a la actividad política, cuando volvimos y estábamos dando los primeros pasos del retorno a la democracia en el año 82, yo tenía 16 años… y en vacaciones yo trabajaba como peón de albañil con mi padre para hacer unos pesos para comprarme “los topper”, “los levi´s”. Y estaba trabajando, reformando lo que era la carnicería de Manzor, y estaba sirviéndole como peón de albañil, alcanzándole el material a otro albañil, que me dijo: ché gurí, ¿no te gusta la política? Y bueno… no sé nada del tema político. Bueno… vos sabés que yo estoy en la lista del Dr Estévez, en la agrupación HAJ… Y están intentando armar un grupo de jóvenes… ¿por qué no te arrimas? me insistió. Era en la esquina de Rodó y Sarandí, donde hoy está la Panadería Punto Dulce…

– ¿Y qué pasó?
– Y me arrimé… – Ese albañil resultó ser Juan Costa Jorge -. Ahí empecé a conocer gente, me entró a gustar, porque al principio era fiesta, porque había ruido, había gurises y gurisas, hacíamos bailes y guitarreadas, y salíamos de “pintarrajeadas” a colgar carteles, y allí conocí a “Tabaré” (Tabaré Viera Duarte), conocí a toda la estructura de la agrupación…

“Yo era la figura en los últimos años dentro de la agrupación, la que articulaba internamente la cohesión 29 2000”

– ¿Y los viejos qué dijeron…?
– Bien. Mis padres les gustó… Yo desde muy temprano fui bastante precoz en cuanto a emanciparme, yo empecé a trabajar a los 14 años ya buscaba hacer un peso en vacaciones para andar con algún peso en el bolsillo. Entonces, cuando le dije eso… porque aparte los dos tenían simpatía… Fíjate que el Dr. Estévez fue el médico de mi parto, cuando yo nací en casa, “el pibo” fue el que me sacó, yo pesé casi 5 kilos y medio, mi mamá es chiquita y… se me fracturaron las clavículas y “el pibo” como que me salvó la vida ahí… en el momento justo de nacer. Así que nuestro vínculo era muy anterior, muy antiguo…

– Como peón político, que nos cuenta en todos los sentidos.
– En el año 1982 yo no votaba porque era menor de edad, y en el 85 yo ya votaba, y para esa elección ya trabajé fuerte, porque incluso, ya tenía algún “carguito”. Me ponían como coordinador de jóvenes, “presidente” alterno, que rotábamos para que todos tuviesen un cargo en algún momento y entonces, ahí fueron mis primeras armas políticas. Porque recuerdo que hicimos un Congreso donde empezaron a venir para hablarnos de lo que era la política, y porque allí las libertades eran mayores, de lo que era el Partido colorado, de lo que era el Partido Nacional o de lo que era el escenario en el cual teníamos actores proscriptos en todos los partidos. Entonces… ahí me entró a gustar la cosa, y vi. que la política podría ser una herramienta que nos permitiera hacer cosas buenas y malas. Como que era la “herramienta” o el camino o el rumbo a alcanzar el poder.

 

“NO PUEDO CREER QUE HAYA HABIDO UN ERROR EN UNA EMPRESA QUE NO ESTÁ DEBUTANDO AHORA. AHÍ HAY OTRA COSA Y YO ME TOMO LA LIBERTAD, Y CORRO EL RIESGO DE JUZGAR Y DECIR QUE: AHÍ HUBO UNA INTENCIONALIDAD POLÍTICA. DE HECHO, YO SENTÍ EN LA CAMPAÑA, QUE HUBO UN ANTES Y UN DESPUÉS DE ESA ENCUESTA”

 

– Usted dice que la política da para hacer cosas buenas y cosas malas. Como qué…
– Y si. Porque me daba cuenta que llegaba gente bien, bien intencionada, que quería y proponía, y otros que venían por la de él… o venían por otros motivos. Se veía, se notaba. Y después, cuando se ganó la Intendencia Departamental – yo no estaba en el 85 porque me fui para Montevideo – por parte del Dr Estévez, ahí fue cuando nuestra generación comenzó a ver los actores en la cancha. Vimos que hubo gente que hacía las cosas de corazón y aunque se equivocase, se equivocaba tratando de hacer el bien, mientras que había otras figuras que estaban para otras cosas…

– Su labor como ascensorista en el mismísimo Palacio Legislativo, ¿qué tipo de huellas dejó para siempre en su vida?
– Cuando entré al trabajo del Palacio Legislativo, lo primero que les tengo que contar es… Yo estaba trabajando en Montevideo, y bueno… yo conocía a “Tabaré”. En aquel momento era vendedor de libros, hice de todo… por último era vendedor de artículos de ferretería y barraca, me tenía que caminar todo Montevideo para vender algo porque lo que ganaba era una comisión sobre lo que vendía, y cada tanto me largaban para el interior a hacer la misma venta… y tenía que dormir en las “Terminales”, por ahí… Entonces, cada tanto iba por el Palacio y le decía: “Tabaré, si surge alguna cosita me vendría bien porque yo quiero estudiar. Porque con el trabajo que tengo no puedo estudiar”. Y surgió, que como en el Parlamento no había funcionado nada durante el gobierno de facto, hubo que dotar de nuevos funcionarios al mismo, y ahí las bancadas decidieron de todas las fuerzas políticas. Asignar – por ejemplo – un funcionario por legislador… Sé que a “Tabaré” le tocó sugerir el nombre de una persona para el cargo de urgier. Y ahí él me la ofreció a mí. Tuve que dar una prueba, ya que se requería una prueba de suficiencia que era básicamente en redacción y lectura y también a honradez, como es el certificado de buena conducta…

– ¿Que le dijo “Tabaré”, el día que consiguió ese puesto en el Palacio?
– Cuando me dijo, fue una cosa increíble, no lo podía creer… Y cuando entro al Palacio aquello era como que tenía miedo de hacer ruido hasta para respirar… Porque el estar tan cerca de aquellas autoridades, los cuales veía habitualmente por televisión o en algún estrado, pero lejos. Fijate que estaba cerca del propio Presidente de la República, bien cerca de mi como Julio María Sanguinetti, Tarigo, me acuerdo de Cataldi – que era el coordinador de la bancada – también de Martín Sturla del Partido Nacional, de Rodríguez Camusso del Partido Comunista, hombres realmente de mucha relevancia en el escenario político, en aquel momento, de nuestro país. Pasaban cerca de mí y yo me paraba, casi que les rendía tributo por el hecho de estar allí…

“LAS ENCUESTAS QUE SALIERON DE INTERCONSULT Y LAS OTRAS DOS QUE SALIERON CON ALGUNOS COMENTARIOS REFERENTES A RIVERA, ALGUNOS MÁS GENÉRICOS QUE OTROS, HOY, Y LO DIGO CON MUCHO PESAR… ESTOY CONVENCIDO DE QUE TENÍAN MÓVILES DE CONDESCENDENCIA CON EL GOBIERNO NACIONAL, COMO MÍNIMO”

– Sin saberlo estaba ingresando a un ascensor que lo llevaría hasta el puesto de Intendente, por lo menos hasta este presente.
– Después que entré me pusieron de ascensorista. Me dijeron: “Vamos a trabajar”, el ascensor era a manija y yo entré… En el 87 empecé “Facultad” a los meses de haber ingresado, y allí me llevaba los libros. Y ahí tenía un taburete y en cada espacio daba una leída… y llegaba la gente y los diputados, y miraban y me decían dándome aliento. Me estoy acordando de Otto Fernández – el diputado de Artigas – el viejo repetía: “Dale, dale, seguí, que vos vas a ir lejos” Y me daban ese tipo de aliento. Y otros me decían: “ché, es increíble que estés en el medio de este ruido y que puedas leer algo vinculado a lo mío”. Fue así que fui estudiando y haciendo la carrera que realmente me da mucha alegría mencionarlo, y no es por vanidad, pero de mi generación éramos 188 y yo fui el primero en recibirme de la generación que comento.

– ¿Para ser veterinario qué hay que sentir?
– Para ser veterinario te tiene que gustar la naturaleza en primer lugar. Tenés que sentir la naturaleza y te tiene que gustar mucho estudiar la naturaleza. Hoy yo tengo un hijo – el mayor – que está estudiando veterinaria, y bueno… creo que es un poco lo que se mantiene, más allá de los nuevos planes de estudio que puedan haber…

– ¿Para ser político qué es lo que hay que sentir o presentir?
– Mi estancia en el Palacio fue de dos a tres años, y después me pidieron para ayudar a trabajar en la secretaría de algún Presidente de Cámara. Recuerdo que trabajé con Víctor Cortazzo, con Adolfo Singer… Después d.C. un concurso para un ascenso para oficial de sala – siempre por concurso de oposición y mérito – y aunque no crea la gente el funcionamiento interno de la Cámara de Representantes, el órgano más político es estrictamente reglamentario. Allá _ en el Palacio – no te perdonan una y tampoco nada. Todo reglamento y te lo hacen cumplir, al menos conmigo cuando yo trabaja allí. Y después me recibí. Y ahí en ese momento “Tabaré” estaba trabajando en OSE, y salí en comisión con “Tabaré” ya para trabajar lo que era su secretaría política. Y ahí empecé a moverme y me mudé para Rivera. Diría que comenzó mi trabajo más político proselitista.

 

“LA REALIDAD ESTÁ EN TENER CONFIANZA EN QUE PODEMOS TENER UN GOBIERNO AUSTERO, QUE NO VA A EMPLEAR A LA FAMILIA AHÍ ADENTRO, QUE VA A CUIDAR LA PLATA COMO SI FUERA DE ÉL, QUE VA A TRATAR DE HACER OBRAS, QUE VA A TRATAR DE TRAER PROYECTOS, QUE VA A TRATAR DE CONTRATAR GENTE POR SU IDONEIDAD NO POR SU COLOR…”

 

– Para marcar un mojón ¿cuando comienza su carrera política paralela a Tabaré Viera?
– La carrera política a nivel local arrancó para mí en el 93, cuando yo me vine de Montevideo. Porque en el 94 tuvimos las elecciones yo tuve mucho trabajo en la campaña. Luego para el 95 perdimos, ganó Riesgo. En ese momento le dieron coparticipación a nuestra agrupación con una dirección general a la cual representé yo, estuve un año y medio y presenté renuncia. Porque no me gustaba la orientación que le estaba dando el gobierno departamental. Tenía permanentemente la sensación de que no estaba haciendo bien las cosas, y di un paso al costado. Me fui pero seguí muy vinculado a la actividad política.

– ¿Qué lugar ocupa su familia, ahora mucho más siendo electo Intendente del departamento?
– Yo me casé en el 85, Bruno nació allá por el 87, Cristian nació por el 91, y Agustina nació en el 2005… MI familia siempre me dio muchísimo apoyo en todas las actividades que yo he emprendido. Yo me considero netamente un emprendedor, realizó muchas actividades simultáneamente. y tengo que poner el freno de mano de vez en cuando porque me paso de rosca frecuentemente, pero la familia siempre me apoyó en la actividad política. Como que hemos tenido un pacto sin proponerlo. A “Ellos” no les gusta la exposición pública y a mi tampoco me gusta exponerlos a la opinión pública, entonces, hoy yo soy intendente… y poca gente conoce a mi esposa, porque a ella no le gusta y yo respeto eso porque creo que mi actividad política es mi trabajo. Y además de político y ahora Intendente, tengo que tratar de ser buen padre, buen esposo, buen hijo, y entonces trato de preservar por carriles paralelos todas estas cosas que te estoy contando.

“Nací en el barrio Rivera Chico, en una “casita” muy humilde, mi papá en ese momento era albañil, mi mamá atendía una peluquería, soy el tercero de cuatro hermanos, después vino una cuarta hermana…”

– El ser Intendente, no es fácil. ¿No?
– No es fácil. Hay una demanda de tiempo y me cuesta muchas veces dejar los problemas “colgaditos” ahí en el banco de enfrente, no traerlos para adentro, me cuesta… Pero, me lo propongo… (Provoca risas su salida y proseguimos). En general trato de respetar. Tengo las actividades que tengo y mucho más ahora las cuales vienen con invitación familiar. Cumplo con el protocolo: “Invitaron a tal cosa, están invitados… Quieren ir, vamos. Si no quieren ir, no vayan. Muy bien, voy solo, y si no puedo ir solo no voy.” Y tá todo bien.

– Tenemos que preguntar porque no lo sabemos. ¿Como es Marne Osorio, en lo íntimo o en esas invitaciones que surgen de turno?
– Yo esencialmente me considero de bajo perfil. Siempre fui de bajo perfil. Porque soy muy tímido. Y me considero con mucha capacidad de trabajo.

– ¿Jugando al fútbol, también es así?
– Cuando juego al fútbol soy medio “rompe todo”, hasta que me rompo yo.Ahora siendo Intendente, estoy con ganas, estoy con ganas realmente… MI última experiencia de fútbol terminé en el sanatorio, tres meses antes de la elección, cuando me caí y me golpee la cabeza y me pidieron en el sanatorio “no más fútbol, hasta despuésde la elección”. Pero me gusta, me gusta mucho el deporte, de hecho, yo practico deporte regularmente. Tengo todos los días diez minutos de ejercicio, y practico natación. Ahora retomé mi natación porque me hace bien.

– ¿Por qué la gente votó a Marne?
– Creo que la gente hoy vota varias cosas. Al menos acá en la elección del pasado 9 de mayo, la gente votó varias cosas… Creo que la gente votó una gestión, que tuvo una impronta. Votó un estilo, de encarar un gobierno departamental. Votó un equipo, que tratamos de mostrarlo siempre. Y no una propuesta personalizada en alguien. Votó un candidato. Que yo traté y me esforcé muchísimo por tratar de hacerme conocer. Tratando de usar palabras lo más ajustadas en el mensaje que yo quisiera y traté de transmitir, y creo que la gente votó un poco todo eso… Pero, yo estoy convencido que la gente no vota en las elecciones departamentales, es un color, un partido o una ideología y mucho menos un número. Menos que menos un número: Porque la gente vota esas otras cosas…

– ¿Por qué será?
– Porque “ellos” saben que ni las ideologías, ni los partidos, ni los números, les resuelven los problemas. Esas cuestiones que son “marketineras” básicamente no son reales. La realidad está en tener confianza en que podemos tener un gobierno austero, que no va a emplear a la familia ahí adentro, que va a cuidar la plata como si fuera de él, que va a tratar de hacer obras, que va a tratar de traer proyectos, que va a tratar de contratar gente por su idoneidad no por su color… digo, ese tipo de cosas, es lo que la gente vota al fin de cuentas. Y creo que nuestra propuesta fue lo que más se aproximó a eso… Y tenemos ahora una enorme responsabilidad, porque el respaldo que tuvimos de la gente, que no es un respaldo colorado sino que es un respaldo de la gente…
– Aumentó. Y vaya si aumentó con más cargos y poder en el Parlamento.
– Si. Aumentó. Pero, además, la respuesta que tuvimos, la votación que alcanzamos fue la más alta de la historia del departamento detrás de un candidato. Superó la de 2005.

“ASPIRO A TENER UN “GOBIERNO DEPARTAMENTAL” Y NO UNA INTENDENCIA DEPARTAMENTAL. Y EL “GOBIERNO DEPARTAMENTAL” PARA MI ES EL EJECUTIVO (LA INTENDENCIA), EL LEGISLATIVO (LA JUNTA) Y LOS GOBIERNOS MUNICIPALES, LAS ALCALDÍAS Y SUS CONSEJALES»

– ¿Tiene algún sociólogo amigo – ahora que está de moda – que le haya alcanzado alguna respuesta para concebir esta “fortaleza colorada” que pese a todo sigue en pie y en manos del Partido Colorado como es Rivera?
– Me lo han preguntado y yo no he hablado con ningún especialista o sociólogo, porque aparte te soy franco… Los sociólogos o politólogos que andan en la vuelta, después de las encuestas desastrosas que presentaron en las últimas elecciones, como que lo que digan me da la impresión que puedan estar con algún tipo de intencionalidad al menos… Lo que yo siento es que el electorado uruguayo está dando mensajes muy claros de lo que quiere y lo que está votando…

– ¿Estará volviendo a la derecha?
– Yo creo que lo de derecha o izquierda es relativo, y creo que las ideologías del partido comunista, del partido socialista y de todos… Considero que los gobiernos tienen que asumir una actitud de renovación permanente.

– Y no de engaño.
– Así es. Acá no existe el modelo. La realidad del departamento de Rivera, es muy diferente a la realidad de Rivera, en el año 2000. Hoy nosotros tenemos una matriz productiva, un entramado social, que es muy diferente y que necesita otro tipo de intervención. Nosotros hoy tenemos un nivel de producción primaria bueno. Está entre los mejores del país. Sin embargo, tenemos desempleo y sub empleo.

– ¿Por qué?
– Porque tenemos poca capacidad en el nivel secundario de producción. Entonces, tenemos que apuntar a que la industria, la construcción, a que la generación energética se profundice en Rivera, y por otro lado, tenemos que capacitar a nuestra gente que no tiene capacidad, no tiene capacitación y tenemos que trabajar en algo que es un fenómeno de la frontera: que es la idiosincrasia hacia el trabajo. ¡Yo no digo que todos seamos unos vagabundos! El tema es que hay que profesionalizar el trabajo. Hay que profesionalizarse.

– ¿Es verdad que Doña María (Terrón de Estévez) que es un símbolo de mucho respeto llega a la Junta Departamental para poner orden en la casa?
– (Hace un suspiro antes de responder) Yo creo que si. Porque aspiro a tener un “Gobierno Departamental” y no una Intendencia Departamental. Y el “Gobierno Departamental” para mi es el Ejecutivo (la Intendencia), el Legislativo (la Junta) y los gobiernos municipales, las alcaldías y sus consejales. Por lo tanto, pretendo tener un Gobierno Departamental que comparta un único proyecto para el departamento. Manteniendo las diferencias, las discrepancias, los ámbitos de acuerdo, que para mí no tienen nada de pecaminosos, por el contrario, son muy saludables. De la diversidad es que emerge la gran unidad. Y la Junta Departamental con Doña María, con “la mama”, estoy seguro de que vamos a poder hacer cosas lindas. Por lo que significa doña María, lo que simboliza ella en el escenario político, porque con aciertos o con errores, con discrepancias o no, es una figura que todo el pueblo de Rivera la respeta por su carrera como servidora pública, y como persona honrada, honesta y muy trabajadora. Eso nos va a ayudar con estos nuevos actores que fueron electos en la Junta, a poder llevar adelante esta visión de departamento, con un proyecto compartido en líneas generales con muchos puntos de encuentro y muchos ámbitos de participación y de coordinación.

“ESTO VA A HACER EL GOBIERNO DE MARNE Y DE MUCHA GENTE MÁS. DONDE MARNE VA A SER EL INTENDENTE, DONDE YO VOY A ASUMIR MI ROL DE “INTENDENTE”, DE ORDENADOR LOCAL Y LE VOY A DAR MI IMPRONTA PORQUE APARTE ES LO QUE ME MARCA LA PROPIA HISTORIA, MI PROPIO MOVIMIENTO”

Digamos la verdad, ¿Rivera, qué es lo que puede aportar al comercio global?
– El abasto ya está en pleno proceso de transformación en un frigorífico de exportación. En seis meses el abasto va a estar faenando los ovinos, en dos años va a estar faenando en su máxima producción para exportar ovinos y bovinos, con una generación de empleo directo de 300 personas. Ese es el abasto que queremos… Es una asociación pública privada, pero es una inversión. ¡Rivera, era el único departamento de Uruguay que no tenía un frigorífico!, en un mercado totalmente competitivo donde tenemos que apostar a la calidad. Entonces, es ahí donde queremos al abasto. La matriz productiva de Rivera es minería, ganadería extensiva e intensiva que se va a empezar a desarrollar y algo de lechería que tenemos, agricultura intensiva con la producción de nuevos rubros en forma rotativa, con la soja o como el sorgo, el trigo o como el arroz, con una fase de industrialización a través del secado y de los silos. Donde tenemos la madera que ya no está solamente en los bosques, sino que la tenemos en el proceso de industrialización con industrias. Tenemos en Rivera, el tercer aserradero de Latinoamérica. Tenemos industrias que ya están procesando la biomasa para su transformación en energía eléctrica.

“El Dr. Estévez fue el médico de mi parto, cuando yo nací en casa “el pibo” fue el que me sacó, yo pesé casi 5 kilos y medio, mi mamá es chiquita y… se me fracturaron las clavículas y “el pibo” como que me salvó la vida ahí…”

– ¿Cuáles serán los polos más visibles para la gente a corto plazo?
– Nosotros con los dos emprendimientos de generación energética vamos a estar generando más energía de lo que consume la ciudad de Rivera. Además, con una industria frigorífica donde no solamente se va a faenar sino que va a generar un mercado de negocios que va a dinamizar la economía local.

– ¿Las ideas de los otros partidos políticos para la elección del pasado 9 de mayo, los va a tomar en cuenta?
– Todos. Todos son bienvenidos. Como el del Autódromo que lo estamos construyendo ahora…

– Por ejemplo, ¿y el traslado de la estación de AFE?
– También… Hay muchas cosas que veníamos trabajándolas… De hecho, yo pretendo y lo he dicho que todos aquellos proyectos, programas, que quieran ser incorporados al departamental son bienvenidos, y voy a respetar y reconocer y decir, donde tenga que decirlo la autoría de cada uno de ellos…

– El hotel 4 estrellas que se está construyendo ¿le cambiará la imagen a Rivera?
– Por supuesto. Para que tengas una idea el hotel va a generar un escenario totalmente renovado y genera un efecto de contagio. Dado que tenemos dos emprendimientos turísticos que a partir del 9 de julio los vamos a llevar adelante. Uno es el hotel 4 estrellas en la zona de Curticeiras, y el otro, es un Complejo Termal en la zona de la Cuchilla Negra. Con ese hotel ya tenemos un turismo de convenciones, que no lo podíamos hacer porque no teníamos dónde desarrollarlo. Habrá una sala de convenciones con 300 butacas, climatizada, con posibilidades de hacer traducciones en simultáneo en varios idiomas. Vamos a tener…

¿Por qué hoy se puede hacer todo esto y no antes?
– Bueno, porque nos llevó cuatro o cinco años realizar esa coordinación. Porque esa ingeniería, la primera, es la que cuesta más…

– Ese “ingenio” del que habla todo el mundo, dice además que la cabeza de “Tabaré” es usted ¿Es cierto?
– (Ríe y contesta) No. No. Yo estoy convencido de que el equipo es la cabeza. Porque nos reuníamos una vez por semana, y vamos a seguir reuniéndonos… y el concepto es el mismo. Una vez por semana a reunirse, a rendir cuentas de lo que es tu responsabilidad, pero también meterle la cuchara a todo lo de los demás compañeros. Con el ánimo de enriquecer. Entonces, nosotros podemos decir que tenemos un “equipo” muy sólido, donde no existe el codazo y la escalera, eso es muy lindo, y muy fácil de llevar todo adelante.

– Mucho se habla por la calle de que este será el mismo gobierno de “Tabaré” y no el de Marne. ¿Como será?
– Esto va a hacer el gobierno de Marne y de mucha gente más. Donde Marne va a ser el Intendente, donde yo voy a asumir mi rol de “Intendente”, de ordenador local y le voy a dar mi impronta porque aparte es lo que me marca la propia historia, mi propio movimiento. Yo no puedo ser la continuidad o el brazo ejecutor de alguien o de algo. Yo tengo mi autonomía y creo que por eso he tenido la oportunidad de crecer dentro de este colectivo, porque he sentido que tengo el espacio para usar mi imaginación y creatividad, y jugarnos si nos va bien, y si nos va mal, contar con el apoyo del colectivo. Y en esta oportunidad en la cual yo soy la continuidad en muchos aspectos, pero también soy la renovación, y voy a tratar de traer savia, sangre e idea nueva porque la realidad me lo marca y me lo exige: Yo quiero seguir apostando a la infraestructura en la obra pública. Pero… ¡yo quiero más desarrollo económico!.

– Cuando sale diputado ¿dudó en postularse para Intendente, por las dudas de que no saliera airoso en la elección?
– No. No fue en ese momento donde yo dudé. Porque yo hasta un año atrás le venía diciendo a la interna que yo prefería que fuera otro el “candidato” a todo.

– Entonces, ¿pesó el pedido de “Tabaré” para que fuera por la intendencia?
– No. No. No. Lo que más pesó fue mi responsabilidad con todo el colectivo y con el proyecto, porque en algún momento – y quiero que esto no quede como un tema vanidoso – pero en algún momento sentí de que era necesario, para poder darle continuidad a esto, de que yo asumiese. Porque mis compañeros de al lado, todos venían y decían: “Tenés que ser vos, porque no hay quien, y esto tiene que salir. Y porque vos tenés la trayectoria dentro del colectivo, la agrupación te acepta a ti…” Un poco como que reunía el consenso. Y ese “consenso” fue el que me obligó de alguna manera a decir que sí, a la intendencia. Lo de diputado, fue casi como de casualidad. Fue una consecuencia que no fue planificada.

– El colectivo le planteó que tomara la determinación de ir por la intendencia, debido a la situación que comenzó a generarse dentro del partido entre “Tabaré” y Guido Machado?
– No. Yo era la figura en los últimos años dentro de la agrupación, la que articulaba internamente la cohesión 29 2000. En la elección del año 1995, donde “Tabaré” hizo la campaña nacional como candidato a vicepresidente, el coordinador por la 2000 acá era yo, y acompañé a “Guido” absolutamente a todo, y trabajé para el ingeniero Guido Machado en todo, de corazón. Porque no sé entregarme de otra forma, sino es totalmente… Cuando llegó el momento de elaborar la lista se dio la posibilidad de que se hiciese un acuerdo con Cal – que había marcado bastante bien en la interna – y Augusto Cal pedía la suplencia de “Guido”, y “Guido” de alguna manera lo sabe que el suplente debía haber sido de la 2000… La idea era que fuese yo. Yo decliné…

– Ah, nos damos cuenta que nos contaron la historia al revés…
– Tranquilamente dije: “Vamos Guido, que sea Augusto…” y se dio así. Lo sacamos diputado. Fue una campaña muy dura, porque estaba difícil conseguir votos e igual los pudimos sacar… Con mucho trabajo. Y en las elecciones departamentales, ahí me ofrecieron la suplencia de “Tabaré”, sabiendo que yo no iba a asumir… Bueno, igual dije: “Vamos arriba, si sirve de algo mi nombre, vamos arriba”. Porque yo quería seguir como Director General, como de hecho lo hice… Y al cabo de unos tres años de gobierno del segundo período, yo ya empecé a manejar y dije: “Miren, que “Tabaré” no puede volver a ser candidato a Intendente, lo lógico es que sea candidato a Diputado. Tenemos que hacer el enroqué. “Guido” tendrá que ser el candidato a Intendente…” Fui a la casa del ingeniero Guido, se lo dije yo personalmente, mano a mano con tiempo: “Guido mirá, tenés que ser tú, yo no quiero”. Y el me decía: “tenés que ser tú, yo quiero ser diputado.” ¡Yo no quiero! le repliqué. Volví a decirle: “Tenés que ser tú y yo te estoy avisando con tiempo. Porque la gente no te visualiza con el tema intendencia. Entonces, tenemos que tener tiempo para mostrarte y para vincularte a los temas municipales.”

– ¿Y qué le contestó Guido Machado?
– Que no. Que no. Que no. Hicimos varios ámbitos de negociación donde yo era el interlocutor por la 2000. Estuve de suplente por “Tabaré”… lo que hice yo, fue proponerle “Vas tú como candidato a intendente y voy yo de suplente contigo, para garantizar que voy a trabajar de vuelta contigo…” Y que no, que no, que no… (me contestó).

– ¿Le sorprendió que a último momento Guido Machado decidiera ser candidato a Intendente?
– Y no. Lo que pasó que llegó un momento que se quebró y nos quedamos sin candidato a Intendente. Y fue ahí donde empecé a sentirme más comprometido con esto, de que iba a tener que asumir yo. Bueno… asumo. Salgo electo diputado. “Guido” se retiró del escenario político, no participó de las elecciones internas y de las nacionales, y cuando tengo que encarar las elecciones departamentales, dijimos: “Nosotros acá tenemos que largar tres candidatos a la intendencia, para poder abrir la cancha”. Y lo lógico es que tengamos las tres agrupaciones con mayor peso, la 29, la 123 y la 2000. Y tratemos de que sea Guido (Machado), Tito (Riesgo) y yo por la 2000…

“Cada tanto iba por el Palacio y le decía: “Tabaré, si surge alguna cosita me vendría bien porque yo quiero estudiar. Porque con el trabajo que tengo no puedo estudiar»

– ¿Y qué pasó?
– Y ahí empecé a darle “ingeniería”… Tito no quiso, después quería que fuera Mauricio (González) y tampoco fue… y después apareció Isidro, y tratamos de ayudar a Isidro. Y le prestamos convencionales porque no le daba para salir “candidato”… Digo, a Guido, porque no tenía ningún convencional. Estuvimos hablando con Guido, y bueno, que si y que… toda aquella cosa de la firma y de no sé qué… Que él armara el esquema como mejor le pareciese, pero que al fin saliera a la cancha. ¡Y le prestamos todos los convencionales! A él lo votó Doña María, “Mingo”, José Mazzoni, nuestros compañeros más allegados fueron los que lo votaron en la Convención… para darle el mensaje de que nosotros queríamos que él estuviera…

– ¿Hubo suerte de que no terminara perjudicando al partido los problemas entre colorados que se generaron antes de la elección departamental?
– Creo que una de las cosas que terminó debilitando al partido a nivel nacional fue el centralismo de decir: “todos están conmigo o son mis enemigos” Hay que aceptar la diversidad de un colectivo que pretende ser grande.

– ¿Como quedó todo con Guido Machado? ¿Puede que alguien de la lista 29 integre algún puesto de gobierno?
– Puede ser, puede ser… Tuvimos una campaña bastante dura de parte de ellos, donde nos “pegaron”, fundamentalmente a mi, me destrataron bastante…

– ¿Por qué Marne, por qué?
– Porque creyeron que era una estrategia de campaña.

– Lo más lógico debía haber venido de otro partido y no del mismo…
– Los que más nos pegaron fueron los de adentro, y creo que ellos querían polarizar con nosotros, y como yo no les daba escenario y no les respondía… se frustró.

– Llamó la atención también lo que dijo en su momento el otro candidato colorado Isidro de los Santos…
– Y por algo votó como votó. Y la gente no es tonta, no le vendés espejitos de colores. Y hoy con la votación que está a la vista, yo en la interna de mi partido y en la externa, estoy conversando con todos…

“LOS QUE MÁS NOS PEGARON FUERON LOS DE ADENTRO, Y CREO QUE ELLOS QUERÍAN POLARIZAR CON NOSOTROS, Y COMO YO NO LES DABA ESCENARIO Y NO LES RESPONDÍA… SE FRUSTRÓ”

 

– ¿Todos los candidatos a la intendencia, al otro día del 9 de mayo, lo saludaron por lo que consiguió?
– Alguno me llamó. Muy pocos. Uno me llamó. Sólo uno.

– ¿De su partido político?
– Ninguno. Sólo uno me llamó. Espere… dos me llamaron.

– ¿De todos los candidatos?
– Si. Dos solamente. Y el resto, yo los he estado llamando a todos. Alguno me ha dicho que intentó comunicarse y el teléfono no dio. Puede ser… puede ser.

– ¿Le sorprende?
– Ah, son temas tan menores… son temas tan pequeños. No es un tema relevante para mí. Por eso no le doy demasiada importancia.

– Un mes antes Diario Uruguay decía que Marne sería el Intendente y trajo mucho revuelo. ¿Cuando usted visualizó esa encuesta y la juntó con la de Interconsult que pensó?
– Nosotros lo que sentíamos era lo que reflejaba la encuesta que presentaron ustedes. Eso es lo que sentíamos en la calle. Porque no es mi primera elección. Y yo no hago campaña en casa sino golpeando puertas… “Me vengo a presentar, soy Marne Osorio”, o sea, ahí tú golpeas cuatro horas, tantas casas, y cómo te reciben y te hablan, tú tenés una idea… Yo tenía la percepción que nosotros estábamos bien. Las encuestas que salieron de Interconsult y las otras dos que salieron con algunos comentarios referentes a Rivera, algunos más genéricos que otros, hoy, y lo digo con mucho pesar… estoy convencido de que tenían móviles de condescendencia con el gobierno nacional, como mínimo. Porque una encuesta se puede equivocar por cinco puntos o por tres, resulta que nosotros votamos más que todos los partidos juntos. Los tres juntos. resulta que tenemos la votación más histórica. Votamos mejor que la anterior elección. Y si no fuese por la cantidad de votos anulados que hubo, por el tema de las elecciones a los municipios, nosotros estaríamos con 17 ediles. Nunca se había dado…

– ¿Y entonces…?
– No fue un error. No puedo creer que haya habido un error en una empresa que no está debutando ahora. Ahí hay otra cosa y yo me tomo la libertad, y corro el riesgo de juzgar y decir que: ahí hubo una intencionalidad política. De hecho, yo sentí en la campaña, que hubo un antes y un después de esa encuesta. Como que veníamos subiendo los últimos días y como que las otras propuestas venían decayendo. Y cuando sale esta encuesta, reanimó a ciertos candidatos. Y es increíble que Doyenart todavía quiera justificar: “Que si leemos bien el informe que él hizo, él manejaba una posibilidad de despegue en siete días.”

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