Vocaciones

"El padre de la idea (Mérica) era un montevideano adoptado por Salto: un gran conocedor del fútbol del interior"

CENTRAL PALESTINO – FÚTBOL CON HISTORIA

El periodista Alejandro de León Saravia presidente de GIEFI, Grupo de Investigación y Estadística del Fútbol del Interior es el autor del trabajo que ofrecemos hoy a nuestros lectores y que representa un detenido estudio sobre una institución deportiva que en pocos años se ganó por derecho propio un lugar de relevancia en el fútbol de esta frontera. Le bastaron 3 años de existencia, caso único en el fútbol del interior y quizás nacional para disputar en cuatro oportunidades el Campeonato de clubes Campeones del Interior.
– Nombre completo: Club Social y Deportivo Central Palestino Fútbol Club
Curiosamente, existen registros y escudos de la institución con las denominaciones C.S.D. Central Palestino y Central Palestino F.C. por separado.
En el dossier del 1er Torneo Integración (1993) figura como C.S.D. Central Palestino F.C.
– Fecha de fundación: 21 de septiembre de 1987
– Dirección: Av. Artigas s/n, Chuy, departamento de Rocha.
– Socios: 694 (diciembre 1993)
– Afiliado a la Liga Regional de Fútbol de Chuy en 1987.
– Uniforme: camiseta roja, blanca, negra y verde a franjas verticales; pantalón negro; medias rojas.
– Uniforme de alternativa: camiseta blanca con vivos verdes, negros y rojos; pantalón negro, medias rojas.
PALMARÉS:
– 2 presencias en el Torneo Integración OFI-AUF: 1993, 1994
– 4 presencias en el Campeonato de Clubes Campeones del Interior (CCCI): 1991, 1992, 1993, 1994.
– 2 veces vicecampeón del CCCI: 1991, 1994.
– 1 vez semifinalista del CCCI: 1993.
– 1 vez Campeón del Este: 1991.
– 1 vez Campeón Departamental (Rocha): 1990.
– 3 veces Campeón del Sector Interior de Rocha (ex Sector 2): 1991-92-93.
– Campeón de Chuy en 1989, 1990 (Liguilla), 1992 y 1994.
LA HISTORIA
La vida del Central Palestino de Chuy fue tan intensa como efímera. Fundado a influjos de la numerosa colectividad árabe-palestina de la vecina ciudad brasileña de Chuí, se transformó en un auténtico fenómeno deportivo y social durante la primera mitad de la década de los ’90.
LOS COMIENZOS
A fines de los ’80, la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) abandona la lucha armada y comienza a transitar la vía diplomática a fin de que los palestinos tuvieran su patria en el convulsionado Medio Oriente. La causa palestina comienza a recibir adhesiones en todo el mundo, no sólo de su pueblo en la diáspora sino también recibiendo la simpatía de Occidente.
Sabido es, que el sur de Brasil, y en particular la ciudad de Chuí, al igual que la paraguaya Ciudad del Este, reúnen el grueso de la colectividad palestina de América Latina.
Al éxito político de la causa, se le suma el éxito económico de la colectividad árabe-brasileña, poseedora de la mayoría de los comercios de Chuí-Brasil. La misma, supo explotar el voluminoso contrabando de los uruguayos, producto de las diferencias cambiarias entre las monedas uruguaya y brasileña, así como de la inestabilidad económica y la hiperinflación del país norteño.
Inmersa en la sociedad brasileña, la colectividad comienza a participar de las actividades deportivas de la misma. La coyuntura geográfica, política y deportiva hizo que la institución patrocinada por “los palestinos del Chuí” pasara a competir en la uruguaya Liga Regional de Fútbol de Chuy. En la frontera, más allá de los idiomas y las leyes, la vida social es una sola.
En ese entorno nace el Central Palestino, el 21 de septiembre de 1987, cuya casaca luce los colores del pabellón palestino.
EL DESPEGUE A NIVEL LOCAL
Con la base económica de la colectividad, el club no tendría mayores problemas para comenzar a destacarse en el pobre medio futbolístico del interior uruguayo. Ya en 1987, se consagra Campeón de la Divisional “B” de la Liga de Chuy y al año siguiente compite en el círculo de privilegio. En 1989 se consagra Campeón del Chuy, lo que le permite participar en el Campeonato Departamental de Rocha, clasificatorio al Campeonato de Clubes Campeones del Interior. En 1990 repite el lauro a nivel local y logra además el Campeonato Departamental rochense, por lo que al año siguiente, tres años y medio después de su fundación, mediría supremacía en la justa de OFI.
“LA MADRE DE TODOS LOS CAMPEONATOS”
En 1991 el club hace su debut en el Campeonato de Clubes Campeones del Interior (CCCI). La inversión económica comenzaba a rendir sus frutos. Los éxitos deportivos se sucedían y con ello, la propaganda de la causa palestina adquiría relieve. Fue el año de la Guerra del Golfo, el año en que se demonizó a Saddam Husseim. Cuentan que en la sede de la institución, una foto del presidente iraquí colgaba junto a los trofeos deportivos y a los distintivos palestinos.
EL URUGUAY HABLA DEL «PALESTINO DEL CHUY»
Ese año ’91 sería inolvidable para el club, que en el CCCI comienza a sortear rivales en sendas eliminatorias en partidos de ida y vuelta. Así, se consagra Campeón del Este, quebrando la hegemonía de cuatro años del Palermo de Rocha. Luego vendrían las semifinales y la final. Todo el Uruguay (el deportivo y el no tanto) ya conocía al “Palestino del Chuy”, el club sensación que, de la nada saltaba a los primeros planos. Tras haberse repartido las victorias con Fritsa de Tacuarembó en las finales, se llega a un tercer encuentro definitorio en Treinta y Tres.
La proximidad geográfica y la simpatía de los olimareños hacia los fronterizos hicieron que el Palestino jugara de local. Dos mil personas viajaron desde el Chuy al Olimar, y con su infernal arsenal de cohetes y “bombas brasileras” hicieron del acontecimiento una fiesta monumental. No obstante, deportivamente el resultado fue adverso: 2-1 ganaron los del Frigorífico Tacuarembó.
LA LUCHA CONTINÚA
En 1991 se crean los Sectores 2, luego llamados Sectores Interior, una agrupación de las ligas no capitales de cada uno de los departamentos. Central Palestino triunfará en las primeras tres ediciones de la justa del Sector a nivel de clubes en 1991-92-93, lo que le permite participar en los CCCI de 1992-93-94.
En el torneo de OFI, en 1992 es eliminado en primera fase por Punta del Este, a la postre Campeón del Interior. En 1993 vuelve a ser semifinalista y con ello accede a participar del “1er Torneo Integración”, un certamen eliminatorio entre 4 clubes de la AUF y 4 clubes de OFI, que proveería dos lugares en la Liguilla Pre Libertadores.
LA PLENITUD
Aquel torneo de 1993 fue el primer intento integrador entre AUF y OFI llevado a la práctica. Por primera vez un equipo de la OFI tenía la chance de lograr en la cancha la clasificación a la Liguilla Pre-Libertadores y, en tal caso, pelear la clasificación a la mismísima Copa Libertadores de América.
Al Palestino le tocó en suerte enfrentar al aguerrido Cerro, de la capital. El encuentro de ida se disputó el 8 de diciembre de 1993 en el Estadio “Samuel Priliac” de Chuy. Fue una auténtica fiesta, con estadio colmado, una gran cantidad de medios de prensa capitalinos y una fuerte presencia de la parcialidad albiceleste. Esa tarde, los ocasionales turistas invadieron los comercios locatarios tentados por las diferencias de precios. Si hasta corrieron rumores que presagiaban conatos de violencia entre las dos parcialidades. Pero nada pasó, el fútbol triunfó. El partido terminó 1 a 1 (el hoy técnico de Nacional, Daniel Carreño, marcó para los locales, entanto Héctor Correa, de penal, marcó el empate para los albicelestes).
Cuatro días más tarde la cita fue en el Monumental Estadio Luis Tróccoli, donde se vivió otra fiesta. Montevideo no tenía visto tanto despliegue pirotécnico en un partido de fútbol como cuando salió el Palestino a la cancha. Otro empate 1 a 1: Alvaro Yapor para Palestino y Diego Viera para Cerro. Finalmente, los penales le dieron la clasificación a Cerro (5-3), cortando la ilusión de los fronterizos. Fue el único equipo del Interior que se retiró del torneo invicto, pues con excepción de Quilmes de Florida que logró un empate de local, los demás equipos perdieron los dos compromisos de la primera fase.
EN PRIMERA FILA
Aquella ocasión la viví en forma muy cercana, pues a influjos del periodista Eduardo Mérica, se había conformado un equipo multi-departamental para seguir la campaña de Palestino a través de Oceánica FM 89.7 de Chuy. El padre de la idea (Mérica) era un montevideano adoptado por Salto: un gran conocedor del fútbol del interior. El relator era un joven de 22 años que venía de Trinidad, era empleado de la Intendencia Municipal de Flores y tenía una voz sensacional, muy al estilo de Víctor Hugo Morales.
Su nombre: Pablo Campiglia. Años más tarde sería el primer relator de la renovada CX 18, por entonces Sarandí Sport, y el año pasado estuvo en la terna de relatores (junto al mismísimo Víctor Hugo Morales y el otro Morales de Cardona) que trasmitieron el Mundial en forma exclusiva por CX 44 AM Libre de Montevideo. Los comentaristas eran Eduardo Mérica y Carlos Dante Cardozo, ex futbolista del Palestino y de la selección rochense, vinculado a la emisora. En estudios, quien esto escribe, con todos los números y la información.
Aquella aventura radial fue tan corta como la vida del Central Palestino en el Torneo Integración, por eso quedó la amargura de no poder seguir transitando los caminos paralelos: el nuestro en la radio y el de ellos en la cancha.
DE NUEVO EN CARRERA
En 1994, tras sortear cinco fases, cae derrotado por Porongos de Trinidad en las dos finales. No obstante ello, logra la clasificación al 2º -y último- Torneo Integración. Sólo que en esta ocasión, la actuación sería más opaca, al caer 1-2 en las dos presentaciones ante el River Plate capitalino.
En 1994, tras años de inflación e hiperinflación, Brasil, de la mano del entonces “Ministro da Fazenda” Fernando Henrique Cardoso, inaugura el “Plan Real”. La nueva moneda brasileña, el Real, se cotizaba a la par del Dólar; una receta que ya habían ensayado con éxito en la Argentina de Menem. En el primer momento, la diferencia de precios dejó de ser abismal para quedar casi a la par de los precios uruguayos. El contrabando dejaba de ser negocio.
El Chuy, al igual que toda la frontera uruguayo-brasileña, dejó de ser tentación para los orientales. La actividad decayó y los negocios se achicaron. Ahora el negocio es comprar “del lado uruguayo”, pues están los “free-shops”, tiendas uruguayas que venden a los “turistas”, productos importados sin impuestos. Los “turcos”, como se les llama en ocasiones a los árabes, perdieron poder económico. En el lejano Medio Oriente, los acuerdos de Oslo de 1993 habían dotado de cierta autonomía a los palestinos: era la hora de comenzar a ejercer, sino la soberanía plena, al menos la administración de los territorios. El romanticismo de la causa palestina cedía terreno a pragmáticos gobiernos autónomos.
Todo ello influyó para que el Central Palestino ya no tuviera el apoyo económico de otrora y comenzara a ceder terreno en lo deportivo y en lo social.
En 1996 no participa del certamen de la Liga del Chuy, mas vuelve al año siguiente, pero ya se escuchaba el canto del cisne. Un par de años más de competencia y el Central Palestino, aquel cuadro que había sido sensación en las canchas del Interior, pasó a la historia.
EL PALESTINO, LA LIGA DEL CHUY Y LOS SECTORES DEL INTERIOR
No es casual que el momento de auge del Central Palestino también lo sea de la Liga Regional del Chuy. Los fronterizos suman poderío directriz a la supremacía deportiva y entran a tallar en las “altas esferas” del “fóbal” chacarero. Junto a la Liga Carolina de San Carlos, son claros ejemplos de ciudades no capitales que claman por autonomía.
Al influjo de estas ligas, nacen en 1990 los “Sectores 2”, luego llamados “Sectores Interior”, un agrupamiento a nivel departamental de aquellas ligas no capitales. Era el fin de las Federaciones Departamentales.

Fuente: Chuynet

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